José Cabello Rodríguez, desde hace cinco temporadas preparador físico del Villareal. Pese a su juventud (aún no ha cumplido los 32 años) posee una amplia experiencia, no sólo en el Villareal, sino antes en el filial de este conjunto, el Onda y también en el Logroñés. Como se puede apreciar un hombre muy ligado al fútbol desde sus orígenes de ahí la valía de su testimonio.

- ¿Cuál es la base del trabajo diario de entrenamiento, los principios básicos que trabajáis en el Villareal?

Es sobre todo mucho trabajo específico, me refiero a lo que hacemos aquí en este equipo, trabajo físico específico con balón; la mayor parte del trabajo que hacemos durante la semana es con tareas similares a las que se dan el domingo en competición. Intentamos que nuestro modelo de trabajo se asemeje lo más posible a lo que es luego el objeto principal del domingo. El 95% del trabajo tiene el balón por medio, muchas semanas es el 100% porque siempre hay algo diferente. Depende si tenemos uno o dos partidos porque las cargas regenerativas cuando tenemos que recuperar jugadores se hacen con carrera continua, pero la mayor parte de las semanas los trabajos son con balón. Buscas intensidades físicas a través de número de jugadores, tipo de tarea que haces.....

- Este entrenador que, digamos es de otra escuela, ¿ qué es lo que espera o qué actitudes te pide?

Fundamentalmente que le ayude y le asesore en intensidades de entrenamiento. Lógicamente quien manda es él, quien propone es él y yo simplemente soy un ayudante más de coordinación que de intensidades o tareas. En función de la tarea que se va a hacer más tiempo o menos tiempo, más espacio o menos, es lo que yo debo coordinar para que el nivel sea el óptimo respecto a la altura de temporada en la que estamos.

-Cuando te ocupas de los jugadores en “exclusiva ¿Cómo te gusta que sean tus entrenamientos?

Intensos, muy intensos; cortos pero muy intensos. En el entrenamiento lo que proponemos la mayoría de las veces son muchos juegos reducidos con mucha intensidad en el trabajo, con espacios suficientes como para que haya una recuperación para el esfuerzo posterior; pero sobre todo te destacaría mucha intensidad y mucho juego reducido.

- Un ejemplo de sesión de entrenamiento en un día de mucha intensidad:

El día duro por excelencia que sería el miércoles siempre que sea una semana limpia, me refiero a que no haya partidos de competición europea por medio. Habitualmente se dobla, se trabaja mañana y tarde, por la mañana tiene un poco más controlados los parámetros de carga, vamos a llamarlo de carga física. Empezaríamos con un calentamiento orientado hacia la fuerza, un circuito de fuerza siempre integrando elementos técnicos, tipo el circuito de saltos de vallas, de uno contra uno con disparos a portería, es decir, acciones más específicas y después acabaríamos jugando un fútbol reducido. Partidos de cuatro contra cuatro con cuatro equipos en tiempos muy cortos de dos o un minuto, el intervalo iría en función de la altura de la temporada en la que estés.

Por la tarde es más habitual todo el trabajo táctico, con menos importancia sobre si el tiempo son dos minutos o cuarenta y cinco, más orientado a situaciones reales del juego.

- ¿Si tenéis un partido por medio en jueves normalmente?

Hombre este año nos ha pasado jugar un domingo ( comenta avispado en tono irónico ) partido de la UEFA porque se suspendió en Rumania pero no es lo habitual. La estructura habitual de este año y del pasado, que ya estábamos en Europa, hasta semifinal o sea que casi todo el año, es: si juegan domingo, entrenas lunes, martes por la mañana; entrenas el miércoles o en el sitio donde vas a jugar o si juegan en casa el miércoles por la tarde para concentrar después al equipo, juegas el jueves y después viernes y sábado entrenas por la tarde si juegan en casa por lo mismo. Durante esas semanas hay el tiempo justo para que los jugadores que han jugado, regeneren para volver a tener una intensidad de trabajo muy alta, que es el partido, y para hacer cargas mínimas para que los jugadores que no jueguen estén en condiciones en el momento de actuar en disposición de poder aguantar la intensidad y el tiempo de partido.

- ¿Qué ejercicio te gusta más?

Partidos de tres contra tres o cuatro contra cuatro o incluso manteniendo posesiones de balón. Esos son los que mejor nos van a nosotros, yo no hago series, no trabajamos con series de atletismo. Nosotros hemos optado en los últimos años por este tipo de entrenamientos más específicos; series de trescientos, de ochocientos que son habituales en algunos equipos de fútbol no las hacemos.

- Manuel Pelegrini, el entrenador es chileno ¿tiene alguna peculiaridad su modo de dirigir dentro de tu apartado concreto?

Cada entrenador es diferente, cada uno tiene su método de trabajo. Este es más partidario de esa forma de entrenamiento que hemos comentado por eso es más fácil adaptar los contenidos a la forma de entrenamiento que queremos y es mucho más fácil programar todo. Sí que es partidario de que todo el trabajo sea específico, que tanto la resistencia como la fuerza se desarrolle con la máxima especificidad.

- ¿Tienes alguna manía confesable?

Tomarme dos cafés. Uno nada más llegar al campo y otro diez minutos antes de salir a calentar pero no creo que eso se puede considerar manía. No tengo una rutina que pueda considerarse manía, salvo eso tomarme dos cafés más o menos con la misma frecuencia.